Empacado de alimentos: ése sí es un empaque

marzo 1, 2021 - Por Inbound Logistics Latam
3204 0

Empacado de alimentos: ése sí es un empaque

 

Por Karen Kroll

Los impactos ambientales, las preocupaciones por los costos y los avances tecnológicos impulsan el deseo por la innovación en el envasado y empacado de alimentos.

Desde los empaques de alimentos fabricados con almidón de maíz y recubrimientos a base de plantas que extienden la frescura de la fruta hasta las botellas de licor hechas de papel, los empaques de alimentos y bebidas tradicionales se están sometiendo a una revisión.

“Numerosas iniciativas en Estados Unidos y Europa financian el trabajo en plásticos alternativos”, comenta Carson Meredith, director ejecutivo del Renewable Bioproducts Institute y profesor del Instituto de Tecnología de Georgia.

Detrás de esta innovación hay un reconocimiento creciente de que la conveniencia de los empaques desechables tradicionales impone costos medioambientales y económicos importantes.

“Los empaques desechables se basan en la extracción continua de materias primas limitadas para mantenerse al día con la demanda del mercado”, señala Bridget Croke, directora general de Closed Loop Partners, una firma de inversión con sede en Nueva York centrada en la creación de una economía circular. Esto degrada los ecosistemas y emite gases de efecto invernadero.

Además, debido a que los materiales se desechan en lugar de recuperarlos al final de su uso, su valor económico también se desperdicia. Las tarifas y los procesos de eliminación también añaden costos.

La creciente preocupación de los consumidores por el impacto ambiental de los empaques y envases de alimentos y bebidas también influye. Las principales preocupaciones de los consumidores sobre el empacado de alimentos son, comprensiblemente, la higiene y la seguridad, según una encuesta reciente de McKinsey & Company (ver cuadro de la página siguiente). Al mismo tiempo, el 55% de los encuestados indica que está extremadamente o muy preocupados por el impacto medioambiental de los empaques y envases.

Los avances tecnológicos también afectan. “La tecnología cambia las reglas del juego al permitir más oportunidades de reutilización”, asegura Tim Debus, presidente y director ejecutivo de Reusable Packaging Association.

Un ejemplo proviene de RM2, que incorpora la tecnología de sensores de Internet de las cosas (IoT) en sus pallets compuestos. Los sensores capturan y transmiten la ubicación, la temperatura y los eventos de impacto e inclinación de cada pallet.

“Los clientes saben exactamente dónde están sus pallets y productos, a qué temperatura están sometidos, si ocurrió algún evento que causó daños, y cuándo y dónde sucedió esto, en tiempo real”, comenta Mark Gordon, vicepresidente senior de desarrollo comercial de RM2. 

La tecnología de sensores es menos costosa y más fácil de usar que la combinación de rastreadores de ubicación, sensores de temperatura y vibración, y acelerómetros que de otro modo serían necesarios para capturar la misma cantidad de datos. 

 

TE RECOMENDAMOS:

Elevar la experiencia del cliente

 

Empaques reutilizables 

La innovación facilita la reutilización de los empaques de alimentos. Por ejemplo, OZZI ha desarrollado un sistema de circuito cerrado de empaques de comida reutilizables junto con un sistema de recolección patentado.

Los empaques de color verde brillante de OZZI tienen la misma forma básica que muchos empaques de poliestireno para llevar. Sin embargo, están hechos de plástico sin Bisfenol A que se puede limpiar y reutilizar cientos de veces y luego reciclar, explica Tom Wright, director ejecutivo de la firma, con sede en North Kingstown, Rhode Island. Tan importante como los propios empaques es la solución de recolección. Para que los reutilizables funcionen, se requiere un sistema de recolección “fácil de usar”, advierte Wright. 

Con el sistema OZZI, denominado O2GO, los comensales toman prestados sus empaques, disfrutan de su comida y luego los devuelven a una máquina de recolección que se parece a una máquina expendedora. Por lo general, estas máquinas se encuentran en varios lugares dentro de una instalación o campus. Cuando las máquinas se llenan, alertan al personal, que luego puede vaciarlas y llevarse los empaques para su limpieza. OZZI promedia una tasa de devolución de alrededor del 98%, asegura Wright. 

La compañía lanzó su solución en campus universitarios y desde entonces se ha expandido a otros entornos tipo campus, incluidos los centros de atención médica, los centros para personas mayores y edificios de oficinas.

Otra empresa, Returnity Innovations, con sede en Brooklyn, Nueva York, se centra en empaques reutilizables para entregas de comercio electrónico. La compañía ha desarrollado soluciones de empaque para otros productos, incluyendo ropa y muebles, y está trabajando en soluciones para empresas de alimentos y bebidas, comparte el director ejecutivo Mike Newman.

Cada solución se adapta a la empresa y al producto, y sigue lo que Newman llama el marco “3P”:

  1. Proceso. ¿Qué proceso se utilizará para recuperar el empaque? Debería ser fácil y de bajo costo.

“Lo más importante para las empresas que buscan productos reutilizables es el costo de devolución del empaque”, expone Newman. Si el modelo logístico existente de una empresa no incluye la devolución del empaque, agregar esta función puede imponer un nuevo gasto significativo.

“Hay formas de hacer que los costos de devolución sean lo suficientemente bajos, pero debe empezar a partir de ese punto a integrar un proceso de devoluciones eficiente o no escalará”, añade. Un proceso de devoluciones que se incorpora como una ocurrencia tardía probablemente será más difícil de escalar.

  1. Participación. ¿Cómo puede atraer al cliente para que lo siga? Por ejemplo, ¿los consumidores pueden devolver sus empaques en el mismo lugar donde hacen otras devoluciones?
  2. Embalaje (packing). Por último, ¿qué empaque cumplirá con los requisitos identificados en los dos pasos anteriores?

Por lo general, los empaques de Returnity usan tela, a menudo fabricada a partir de botellas recicladas, en lugar de molduras de plástico. Una razón: la tela suele ser más rentable en pequeñas cantidades. También tiende a funcionar mejor para los artículos que no se apilan en pallets, sino que se transportan en una bolsa de mensajero para bicicletas.

Cualquier paquete de comercio electrónico también tiene que “ganar la experiencia del umbral de la puerta”, señala Newman. Con las compras en línea, el paquete suele ser la única conexión física entre la empresa y el consumidor, agrega. Necesita crear una impresión favorable.

El Liviri Shuttle, diseñado para servicios de entrega de comestibles locales, es liviano, aislado y reutilizable, dice el portavoz Logan Martínez. Debido a que el Shuttle puede mantener los productos perecederos en una zona de temperatura segura durante más de 12 horas, hace posibles las entregas sin supervisión, lo que aumenta la eficiencia de la ruta.

Después de recibir un envío, los consumidores simplemente sacan sus productos perecederos de la caja, cierran la tapa, colocan la etiqueta de envío de devolución incluida para su recolección y la devuelven por FedEx u otro servicio de mensajería.

 

Reconsiderar el embalaje tradicional

Algunas empresas están ideando formas de utilizar materiales de embalaje tradicionales de formas más respetuosas con el medio ambiente. El gigante de las bebidas Bacardi, por ejemplo, está desarrollando una botella de papel y una botella de biopolímero biodegradable, ambas programadas para su disponibilidad comercial en 2023, comenta Jean-Marc Lambert, vicepresidente senior de operaciones globales. Estas botellas ayudarán a reemplazar los 80 millones de botellas de plástico que Bacardi produce al año en la actualidad.

Ambos tipos de botellas se biodegradarán aproximadamente en 18 meses, en comparación con los más de 400 años que requieren las botellas de plástico para descomponerse. “Es un gran paso hacia el objetivo de la empresa de estar completamente libre de plástico para 2030”, afirma Lambert.

Además, Bacardi se ha comprometido a compartir la tecnología utilizada para fabricar su botella de biopolímero después de su lanzamiento. “Queremos ayudar a mejorar las cosas para toda la industria”, dice Lambert.

A medida que más empresas cambien los plásticos por alternativas biodegradables, los costos de producción disminuirán, lo que las convierte en una opción viable para más empresas aún.

Recart, un nuevo producto de Tetra Pak, una empresa de soluciones de envasado y procesamiento de alimentos, ofrece una alternativa a las latas y botellas. El cartón utilizado en Recart puede reducir las emisiones de carbono que se generan con los envases de vidrio y aluminio tradicionales en un 81%, dice la compañía. Además, el valor de un camión de envases de cartón Tetra Recart vacíos, entregados desinflados, equivale a nueve camiones de latas vacías, observa Lars Holmsquist, vicepresidente ejecutivo de soluciones de envasado y operaciones comerciales de la empresa con sede en Lausana, Suiza. 

Los envases de Recart pesan 20 gramos (menos de una onza) en comparación con los 50 gramos (1.8 onzas) que pesa una lata; la diferencia aumenta aún más si se comparan con los frascos de vidrio. “El costo total de producción cuando se utilizan envases Tetra Recart en lugar de latas ofrece un ahorro del 15% al ​​20%”, señala Holmquist. La forma rectangular de los envases Recart también los hace muy adecuados para el envío.

Algunas empresas están desarrollando empaques hechos con recursos renovables que no se utilizan habitualmente como materiales de embalaje. Por ejemplo, el empaque ClimaCell de TemperPack está hecho de una mezcla de almidón de maíz y papel kraft, y puede ayudar a reducir el uso de espuma de poliestireno, dice Jed Dutton, vicepresidente de marketing de la empresa con sede en Richmond, Virginia.

Como resultado de numerosos experimentos con cientos de formulaciones, ClimaCell es liviano, fuerte y atrapa el aire para que no deje salir el frío ni el calor. Puede proteger las entregas durante la noche y en dos días para los kits de comida, alimentos preparados, medicamentos y otros productos.

También se puede fabricar a escala, competir con la espuma de poliestireno en precio y enviarse desinflado. La misma importancia tiene su “buena presentación”, añade Dutton.

 

Película que brinda protección

Algunas innovaciones de embalaje no son técnicamente empaques. Apeel, con sede en Goleta, California, ofrece un recubrimiento a base de plantas que puede duplicar la caducidad de los productos, reduciendo la dependencia de los empaques de plástico y la necesidad de refrigeración, dice la compañía. Para ello, crea una “piel” comestible en la superficie exterior de los productos frescos que retiene la humedad y resiste la oxidación, lo que ayuda a retrasar el deterioro.

La fórmula de Apeel se distribuye en forma de polvo y luego se mezcla con agua en el centro de empacado, donde se puede aplicar mediante pulverización, inmersión o cepillado. Actualmente, Apeel está disponible para proveedores orgánicos y convencionales de muchas variedades de productos, incluidos aguacates, naranjas, limas, pepinos y manzanas.

La empresa también está trabajando para desarrollar fórmulas para otros artículos. Debido a que los factores que determinan la caducidad de los productos, como la pérdida de agua y las tasas de maduración, varían con las propiedades de la superficie como la rugosidad y la porosidad, se necesitan diferentes formulaciones para diferentes tipos de productos. De manera similar, StixFresh usa una etiqueta adhesiva que se coloca en la fruta, la cual contiene un compuesto que libera una barrera protectora, lo que ralentiza el proceso de maduración y hace que el producto sea menos susceptible a pudrirse, explica el director ejecutivo y cofundador Moody Soliman. La etiqueta se puede pegar en cualquier momento después de la cosecha, incluso por parte de los consumidores, aunque ofrece el mayor impacto cuando se pega en la etapa de distribución. Ahí es también cuando se aplican muchas etiquetas de marca, lo que facilita su incorporación en el proceso. Para las frutas del bosque y otras frutas que a menudo vienen en recipientes tipo almeja, StixFresh se puede rociar a través de una bolsita que se coloca en el paquete. La empresa, que tiene su sede en Estados Unidos en Kirkland, Washington, ha probado su solución con un minorista europeo. StixFresh redujo las pérdidas en arándanos en un 25% después de siete días y en nectarinas en un 30% después de siete días, agrega Soliman. 

Junto con los productos agrícolas, StixFresh busca expandirse a otros tipos de alimentos, como los productos horneados. Para lograrlo, el equipo de investigación y desarrollo de la empresa identifica las enfermedades que afectan a los alimentos, así como los compuestos que pueden atacar las enfermedades. “Desarrollamos las formulaciones y podemos aplicarlas a una variedad de superficies”, asegura Soliman. 

 

TE RECOMENDAMOS:

Logística marítima: automatizar e innovar

 

Ponderación de los desafíos y beneficios 

Si bien estas innovaciones ya han mostrado beneficios sustanciales, todas las nuevas soluciones de empaque y envasado enfrentan desafíos. Estos empaques y envases cambiarán la forma en que los materiales fluyen a través de las cadenas de abastecimiento. 

“Estas soluciones están diseñadas con sistemas de recuperación completos en mente, teniendo en cuenta a dónde van los materiales después de su uso y cómo pueden mantenerse circulando en nuestra economía durante el mayor tiempo posible”, señala Croke. Si bien todos estos son cambios positivos, aún requieren ajustes. 

Debido a que el empaque está incorporado dentro de los procesos de muchas empresas, cambiar de un tipo a otro puede requerir cambios operativos significativos. 

La mayoría de las empresas alimentarias requerirá probar los nuevos empaques y envases. Además de confirmar que mantienen los alimentos seguros y limpios, querrán comprobar si afectan el sabor del producto, expone Tom Porter, vicepresidente de proyectos industriales de la firma inmobiliaria JLL.

Y el cambio en el comportamiento de los consumidores de toda la vida no sucederá de la noche a la mañana. “No existe una panacea para el complejo problema de la reducción de desechos a nivel mundial, y la amplia gama de soluciones que se adaptan a diferentes contextos debe probarse a fondo con el tiempo, antes de hacer un uso generalizado”, señala Croke.

Al mismo tiempo, es posible presentar un caso comercial sólido para muchos tipos de empaques reutilizables y sustentables, incluso antes de considerar los beneficios ambientales.

Por ejemplo, los empaques reutilizables suelen ser más resistentes que las opciones desechables. Eso puede significar que es posible apilar más paquetes uno encima del otro, lo que permite un envío más eficiente y menos costoso. Los empaques reutilizables también pueden reducir los costos de eliminación.

“Revise cómo los empaques reutilizables impulsarán la eficiencia en su empresa”, recomienda Debus.

 


Johnnie Walker lo pone en papel

Tradicionalmente, existen dos opciones principales de materiales para la fabricación de botellas: vidrio y plástico. El plástico es barato, liviano y fácil de reciclar, pero tarda mucho tiempo en degradarse. El vidrio es más resistente, de mayor calidad y con un reciclaje casi infinito. Pero se necesita más energía para reciclar vidrio y su peso adicional agrega más emisiones a su envío. Ambas opciones tienen sus altibajos en emisiones y contaminación.

Sin embargo, Diageo, uno de los mayores productores de cerveza y licores del mundo, asegura que tiene una solución para este problema. La compañía descubrió que produce gran parte de su huella de carbono al principio de su cadena de abastecimiento, incluso las materias primas y los envases. Estas se clasifican como emisiones de alcance tres, que la empresa no controla directamente.

En un intento por cambiar esto, Diageo lanzará una nueva botella de papel para su marca de whisky Johnnie Walker en 2021.

Diageo trabajó con la empresa Pilot Lite para crear Pulpex, una empresa que producirá botellas sustentables a partir de pulpa de madera. Se invitó a participar a otras empresas de sectores no competidores.

Pulpex afirma que sus productos tendrán una huella de carbono un 90% más pequeña que el vidrio y, en lugar del revestimiento estándar a base de plástico, el interior de las botellas se rociará con un recubrimiento para evitar que se empapen. Diageo también está trabajando con los proveedores para optimizar sus botellas de vidrio, por ejemplo para aumentar su contenido reciclado y disminuir su peso.

–Matt Hoyer, Thomas Insights


 

Tags

PARTICIPA CON NOSOTROS

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *